La Falla de Ramón es una falla geológica activa, que se encuentra situada al oriente de Santiago, la capital de Chile, siguiendo el pie del cerro de la sierra de Ramón a la que debe su nombre.
Tipo de Movimiento: Falla inversa
En el campo de la geología, se denomina falla a una fractura, generalmente plana, en el terreno a lo largo de la cual se han deslizado los dos bloques el uno respecto al otro. Las fallas inversas son fallas con desplazamiento vertical en donde el bloque de techo se mueve hacia arriba con respecto al bloque de muro. Dado que el bloque de techo se mueve hacia arriba y sobre el bloque de muro, las fallas inversas reflejan un acortamiento de la corteza.
Otros tipos de fallas
Falla Normal
Falla Vertical
Falla de Desgarre
Posibles efectos
La Falla San Ramón representa dos fuentes de amenaza directa para la Región Metropolitana, llegando a afectar más de tres millones de personas. Si bien el último episodio sísmico a causa de esta falla ocurrió hace 8.000 años atrás, esta sigue activa y un posible sismo podría generar graves efectos.
Promedio de la intensidad sísmica según su profundidad hipocentral
(Escala de evaluación sísmica a base de los efectos y daños producidos por un sismo)
En el caso de un episodio sísmico de 7,5 Ritcher y gracias a la distancia de 5 km del hipocentro, el daño producido alcanzaría los 9 grados en la escala de intensidad macrosísmica, la cual mide el daño producido por un sismo. Esto significaría que el sismo sería de categoría ‘’Destructor’’, provocando pánico general, dificultad para pararse de pie, y alta probabilidad de daño e incluso derrumbe de edificaciones.
Urbanización del Gran Santiago sobre la Falla de Ramón
La falla ha experimentado en sus últimas décadas un aumento considerable de áreas urbanizadas en el piedemonte de su borde oriente, donde se localiza la Falla San Ramón (FSR), de modo que se ha vuelto un nuevo escenario de riesgo geológico. Usando incuestionables atractivos sobre el medio natural, la vista panorámica a la ciudad y un ambiente saludable, se han promocionado proyectos de vivienda de alto costo que conviven con este riesgo sísmico, pero que parecen desestimar desde los instrumentos de planificación de nivel comunal y metropolitano, tales como el Plan Regulador Metropolitano de Santiago (PRMS).
Zonas de riesgo
Los estudios realizados con simulaciones para un sismo de magnitud 7.5 en escala Richter han identificado áreas las cuales tendrían distintos niveles de intensidad de movimiento y que irían entre alta-alta, media alta y media. Estas categorías están dadas por las aceleraciones del suelo que produciría dicho sismo y han sido establecidas de acuerdo a ciertas distancias según la simulación.
- ⬤ Zona de riesgo medio
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Superficie: 50.073 ha.
Habitantes: 1.513.663
Viviendas: 541.952
- ⬤ Zona de riesgo medio-alto
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Superficie: 33.000 ha.
Habitantes: 863.696
Viviendas: 293.625
- ⬤ Zona de riesgo alto
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Superficie: 38.500 ha.
Habitantes: 515.552
Viviendas: 161.782
El sector se transforma en un elemento de riesgo real y por esto es necesario tener conciencia de la falla y tomar medidas, como por ejemplo, reconocer la existencia de la falla en los planos normativos y generar zonas de resguardo y restricciones. Además, se debe restringir la construcción sobre la traza de la falla que aún no se ha edificado para así disminuir las zonas urbanas de riesgo y proteger a los habitantes de Santiago de un posible desastre.